Un abuelo le limpia a su nieto, tras quitarle la mascarilla, los restos del «cornetto» que se acaba de comer. Una escena que no tendría nada de especial un día cualquiera, pero que hoy simboliza en Italia la vuelta a una relativa normalidad tras casi dos meses de confinamiento.
El parque de Villa Borghese, pulmón verde romano y el lugar favorito para pasear de sus habitantes, reabre este primer día de «fase 2» con la hierba descuidada y con un enjambre de niños, patinetes, bicicletas y corredores, aliviados de poder salir al tan ansiado aire libre en un día casi veraniego.