A través de redes sociales amigos, estudiantes y conocidos de Eduardo Barbosa a de 85 años, solicitaron el apoyo en recursos para que el trabajador abuelito pueda sobrevivir a la pandemia por Covid-19, después de que se quedara sin su principal fuente de ingreso.
Eduardo vendía portacredenciales afuera de Ciudad Universitaria, con lo que se ayudaba para vivir al día.
Luego del cierre de las instalaciones de la BUAP, los alumnos dejaron de asistir a clases, por lo que el señor de la tercera edad se quedó sin sus principales clientes.